La empresa donde trabajaba, la CGCT, tenía su sede social en la Rue de Vaugirard, cerca del metro Vaugirard. En los primeros años me tocó trabajar en unos laboratorios que se alojaban en un edificio alquilado en un barrio suburbano al oeste de París llamado Petit Clamart, justo enfrente de donde había habido en los años sesenta una tentativa de asesinar al general de Gaulle cuando era presidente de la República. Poco después de nuestro retorno de Río la empresa mudó los laboratorios de Petit Clamart a la sede central en la Rue de Vaugirard en el XVé..

El edificio principal de la CGCT permanece tal cual era. Un edificio anexo, que en el pasado había sido una fábrica y que en mi época estaba reconvertido en oficinas y laboratorios, ya no existe y en su lugar hay un gran edificio de viviendas. El edificio anexo no es una gran pérdida ya que no era nada bonito. Solamente tenía un valor mítico ya que se contaba que, durante las revueltas de mayo del 68, el edificio había sido tomado por los trabajadores de la CGT y en el patio del anexo tuvo lugar una gran batahola capitaneada por quien en mi época era el director general de la empresa. La historia decía que este señor, de apellido Besançenot, había desalojado el anexo al frente de un grupo de leales, corriéndolos en el patio ayudado por las mangueras de incendio.

El 251 de la Rue de Vaugirard era una de las direcciones bien conocidas en la ITT, que era la empresa madre de CGCT debido a que ahí se habían originado montones de ideas, patentes y problemas en el mundo de las telecomunicaciones durante años. Lleno de gente difícil ...

El barrio de Vaugirard había sido de artesanos y de pequeños talleres y luego, en mi época, comercial. Está bien comunicado porque se sitúa cerca del contorno de París: el periférico se encuentra a dos estaciones de distancia, en la Porte de Versailles.

En la época de la CGCT la zona estaba repleta de comercios, pequeños restaurantes y cafés. Cada quien tenía su parada y así era fácil encontrar a los empleados de la empresa. Al lado de la CGCT está la Rue Cambronne, que en aquella época estaba ocupada por comercios de comestibles. Así desde la mañana temprano los comerciantes sacaban sus mostradores a la vereda y ahí estaban, colgando, todo tipo de faisanes, gallinas, cabezas de cerdos, en fin, un zoológico muerto. Pero ahora todo devino en una calle comercial como otra, una lástima.

No lejos de la CGCT nos recomendaron una escuela donde Paul podía empezar su (ahora vemos, fallida) educación. Se llama "Les Saints Anges" y allí terminaron yendo Paul, Flor y el Guille hasta que dejamos París. La escuela sigue tal cual como era entonces ...

... así como la panadería donde compraban pain au chocolat cuando salían, en general rabiosos, de la escuela. En cambio no está la juguetería de enfrente, la del papá de Kanji, el compañerito de Paul que la mamá era japonesa. Otro deber investigativo pendiente para la próxima ocasión.

A la vuelta de ahí, en la Rue des Morillons, está el jardín Georges Brassens, hecho en los terrenos del antiguo matadero de caballos, donde los chicos iban a veces a descargar stress escolar, esto dicho sin segundas intenciones. En la época toda la zona estaba en proceso de recuperación. Hoy el parque está completo. Si quieren verlo por dentro miren esta peliculita.

Como ahí estaban cerca la escuela de los chiquis y el trabajo, Vaugirard se convirtió en nuestro segundo barrio. Muchas veces Coyi recogía a los chiquis a la salida de la escuela y se iban a la place Adolphe Chérioux, al lado de la entrada del metro, y esperaban mi salida de la oficina. (A veces esperaban bastante)

Al fondo de esta foto se alcanza a ver la casa de los Kleiber, es decir de Arnaud, un amigo del alma de Paul en aquella época.

El café de la Mairie, que está frente a la plaza y cerca de la Mairie del XVé., era una de nuestras paradas con Coyi. Cada tanto, cuando había sol, también íbamos a tomar un café al mediodía con mi jefe y otros colegas del trabajo. Una secretaria que tuve decía que todos los que íbamos a ese café al mediodía éramos una banda de viejos "schnock" (babosos) que íbamos a ver a las mocosas que salían del liceo.

A veces desde Vaugirard volvíamos a casa en un colectivo que se llamaba PC (Petite Ceinture), que iba rodeando París por el Boulevard Victor, cruzaba el Sena y nos dejaba cerca de casa. Ahí hubo un cambio importante porque ahora hay una línea de tranvía, menos espacio para los autos y también menos autos. ¿Qué será más práctico, esperar que esto mismo pase en la avenida del Libertador o volver a París? ... bueno, vistos los precios del metro cuadrado en París, no creo que exista la alternativa.

En fin, este es el cuentito del segundo barrio. Ni se imaginan lo que les espera en el resto de la fotonovela así que a cliquear sobre la próxima fotito. Merci.