San Martín de los Andes - esquiadita y regreso ... en tren

¿Cansado de los terribles asientos de LAN (LA-Narrow Class)? Entonces mejor Vía Bariloche: uno se duerme después de cenar (¡con vino!) y se despierta llegando a Zapala. A propósito, en la parada que hizo el bus en el cruce de 9 de Julio subió quien sería mi compañero de asiento y me contó una pequeña historia.
(Si desea saber lo que me contó mi compañero de asiento, sígame que no lo voy a defraudar.)

Después del desayuno, un poco del paisaje en la ruta 40 que ahí se vuelve algo más variado y llegamos a San Martín a tiempo para almorzar.
Esta foto se podría llamar "Las Dos Torres": entre el cura Saruman y el intendente Sauron.

Todo en el pueblo luce cuidado y en buenas condiciones. ¡Hasta los automovilistas ceden el paso a los peatones! Me pregunto qué cosas terribles harán cuando nadie los vé ...

Creo acordarme que la última vez que fuí con los chiquis (¡hace tanto tiempo!) paramos aquí. Por cierto que la hostería está en mejores condiciones que como la recuerdo.

Cruzando el rio, donde ahora está la estación de depuración de efluentes, y subiendo un poquito se gana una buena vista como para verificar si todo está en su lugar. Supongo que Saruman y Sauron se dan cita aquí para conspirar.

Gracias a una oportuna nevadita, al dia siguiente de mi llegada todo estaba bien esquiable en Chapelco y se podía llegar hasta la base con honor, aunque en el último tramo la nieve estaba bastante pesada.

Muy poca gente!! Así se veía la pista de los Italianos casi a toda hora. Un placer poder bajar en grandes curvas de lado a lado, bién rápido.

A lo largo del Poma del Filo, la nieve estaba perfecta. En cuanto a la vista, la foto habla por sí.

El inefable Rancho Manolo con sus propiedades alquímicas que transmutan las milanesas en oro.

Desde el Rancho, la vida parece tener sentido, tanto hacia arriba ...

... como hacia abajo.

En fin, tuve tres buenos dias de esquí sin parar. Al final del final bajé de un tirón desde el filo hasta la base procurando hacerlo bien y me quedé con eso en la memoria. Así estoy seguro de que el año que viene trataré de repetirlo.

Pasé el último dia caminando un poco como para poder comer demás sin tanta culpa. Arranqué en el puerto ...

... y tomé el camino que lleva al mirador Bandurrias. Enseguida al subir un poco se tiene un lindo panorama de la Villa.

Esta vista se llama ENVIDIA!!

Desde el mirador Bandurrias, que se encuentra dentro de una hermosa reserva mapuche, la vista es muy despejada hacia la margen sur del lago ...

... y hacia el oeste, hacia la cordillera, con la península Quila Quina al frente y el Paso Hua Hum al fondo ... bueno, aquí no pude evitar pegar una panorámica como las de los fotógrafos de la antigüedad.

Alrededor del mirador se encuentra una reserva mapuche en medio de una hermosísima comarca. Aquí algunos paraisitos, al menos para mi gusto.

En esta casa no falta ni el humo de la estufa saliendo por la chimenea. El olor a leña, en el estado actual de Internet, no puedo ponerlo.

Al dia siguiente de la caminata tomé otro bus que me llevó a Villa La Angostura y, finalmente, a Bariloche por el camino de los Lagos. A propósito, desde hoy ese camino quedó incorporado a la mítica Ruta 40.